
- Anu. El dios del cielo superior (firmamento)
- Enlil. El dios del aire, o en nuestro propio sentido, la atmósfera.
- Enki. El dios de las aguas.
- Inanna. La diosa del amor y la guerra.
- Dumizi. Dios de la fertilidad y amante de Inanna.
- Ereshkigal. Diosa de los infiernos.
- Gibil. Dios del fuego y la arquitectura.
- Ishkur.
- Marduk
La mitología mesopotámica engloba las creencias religiosas, mitos y leyendas que surgieron en las antiguas civilizaciones de Mesopotamia, entre los ríos Tigris y Éufrates, que hoy forman parte de partes de Irak, Siria y Turquía que incluyen a los sumerios, acadios, babilonios y asirios, que, desarrollaron un sistema complejo de creencias sobre la creación del mundo, dioses, héroes y la relación que existía entre ellos y los humanos.
Los dioses de la mitología mesopotámica eran entidades vigorosas con características humanas, pero que vivían en un mundo paralelo y donde reinaba una jerarquía y que eran venerados y temidos por los humanos ya que se creía que ellos eran los que provocaban e influían en los eventos de la tierra originando plagas, guerras malas cosechas, etc.
Anu: Se lo conocía como el dios del cielo y el padre de todos los dioses.
Enlil: eran una de los dioses más poderosos conocido como dios del viento, las tormentas y la agricultura.
Ea (o Enki): Benefactor de la humanidad en los mitos sumerios, Dios del agua, la sabiduría y la magia,
Ishtar (o Inanna): Diosa del amor, la fertilidad y la guerra.
Marduk: Un dios babilónico que llegó a ser la deidad principal de Babilonia, vinculado a la creación del mundo.
Los mesopotámicos creían que el universo surgió de un caos primigenio de agua.
Uno de los mitos más importantes es el «Enuma Elish», que narra cómo el dios Marduk derrotó a Tiamat, la diosa del caos, y creó el mundo a partir de su cuerpo creando también a la humanidad para servir a los dioses y aliviarles de sus labores o como se puede decir vulgarmente, para hacerles el trabajo sucio.
Existe también una antigua historia similar a la narrada en la Biblia. el «Poema de Gilgamesh”, donde el héroe Utnapishtim es avisado por el dios Ea de un gran diluvio que destruirá la humanidad y este construye un barco salvando a su familia y a animales, y recibe la inmortalidad de los dioses.
El Poema de Gilgamesh es una de las historias más importantes de la mitología mesopotámica, considerada la obra literaria más antigua de la humanidad.
La mitología mesopotámica influyó en las religiones y mitologías de otras culturas antiguas, como la hebrea, la griega y la egipcia y también fueron fundamentales para el desarrollo de sistemas de gobierno y leyes (como el Código de Hammurabi).
Los mesopotámicos creían en una vida después de la muerte, pero el inframundo mesopotámico era un lugar oscuro y sombrío llamado Kur o Irkalla, donde las almas de los muertos vivían una existencia de sombras y sufrimiento gobernado por La diosa Ereshkigal.
En resumen, la mitología mesopotámica es un sistema complejo de creencias que refleja el profundo respeto y temor de los antiguos mesopotámicos hacia los dioses y los fenómenos naturales, así como su intento de entender el mundo y su lugar en él.