LOS HIJOS DEL CUARTO SOL
“El mal del mundo es tan grande que ya llegó hasta el cielo”
Babilonia la Grande, la Madre de todas las fornicaciones y abominaciones de la Tierra, será destruida, y de toda esta perversa civilización de víboras no quedará piedra sobre piedra …
(Profecía)
Ha habido muchos cataclismos en la tierra, pero la clave está en la leyenda de la Atlántida.
Muchas especies diferentes han sido genéticamente modificadas, manipuladas y abandonadas en zonas inaccesibles antiguas del mundo como selvas y montañas, muchos de ellos todavía siguen allí y es de suma importancia que conozcáis nuestro pasado así como la forma en que hemos estado y seguimos siendo manejados para así poder entender mejor el tiempo presente y tomar mejores decisiones para el futuro y es por ello que me complace relataros la leyenda de la Atlántida y lo que allí sucedió, así que entremos en materia sin más dilación.
Hoy día, si el mundo tiene algún conocimiento sobre la Atlántida ha sido gracias a el filósofo griego Platón que a través de los diálogos de Crítias fue el primero en hacer referencia a una leyenda de la antigüedad en la que se menciona un reino mitológico situado en una isla o península llamada Atlántida.
Según el relato de Platón, Crítias había escuchado esta historia de su abuelo, que a su vez la había oído del político ateniense Solón y a este último se la habían transferido los sacerdotes egipcios de la ciudad de Sais, la tierra de los faraones situada en el delta del Nilo en Egipto.
Hoy en día al planeta en el que nos encontramos se le conoce como “La Nueva Atlántida” y sus opresores por llamarles de alguna forma saben perfectamente que alterando la historia tienen total dominio sobre sus habitantes y es por eso por lo que los seres humanos viven anestesiados sin ser conscientes de que desde el principio de los tiempos han sido manejados y sometidos.
En primer lugar y antes de que entréis en pánico veo necesario añadir que a la raza humana se le está ofreciendo una nueva oportunidad de rectificar y escoger, aunque con algunas ventajas ya que, por una parte, la cantidad de millones de seres que pueblan hoy el planeta es mucho más elevada que la de entonces y la cantidad de luz que estamos recibiendo desde el centro galáctico hacen a todos los seres que moran en él inevitablemente mucho más conscientes.
Como ya habréis escuchado, el diluvio ocurrió aproximadamente a la mitad de un año galáctico y ahora estamos completando un nuevo ciclo alrededor del zodiaco y aunque las energías ya eran fuertes en el momento de la Atlántida son mucho más intensas en el presente.
Debéis saber que la ignorancia e indiferencia que domina en el planeta por parte del ser denominado humano puede ser la causante de que todo acabe con una nueva catástrofe mucho aún más aterradora que la anterior, pero por otro lado la gran cantidad de seres que ya están siendo conscientes de los planes de sus perversos captores puede ayudar a su vez a terminar de una vez por todas con esta esclavitud.
Como veis, la historia se repite en una rueda sin fin, sin embargo, esto no impedirá que los oscuros nos destruyan ya que hemos llegado al punto en que el tipo de final que se dará va a depender exclusivamente de nosotros y de cuando queramos dar por terminado el juego.
Ha llegado el momento de luchar porque ahora son nuestras almas las que están en juego por eso esta vez no podemos tomar el rábano por las hojas, no habrá vuelta atrás y es por ello que tengo la misión de contaros todo lo que en aquella increíble época aconteció y como una guerra descomunal y monstruosa se dio entre los pueblos que habitaban en las columnas de Hércules
Hay mucha confusión sobre quién estaba a cargo en la Atlántida en aquel período y dado que historiadores, estudiosos y arqueólogos de todos los tiempos han deseado descifrar el misterio de la Atlántida, lo que os puedo contar es que cuando las matriarcas construyeron los templos, el planeta Venus tenia vital importancia tanto para los Atlantes como para los Lemurianos. EA es calificado como Lucifer por muchos, de echo en la Biblia se le nombra como la ‘Estrella de la Mañana” que es otro nombre para Venus y este planeta también adquiere suma importancia espiritual en culturas indígenas de América del Norte y del Sur.
En todas las épocas y períodos de la historia de la humanidad se han dejado escritos en los que se cuentan hechos muchas veces entendidos como mitos y leyendas, otros como testimonios y revelaciones y en ellos vemos como describen la rebelión de Lucifer y sus ángeles Pléyades que se produjo mucho antes de que el Planeta Tierra fuera conocido como lo que entendemos ahora, en escritos sumerios se pueden nombrar como EA o Enki lo que en otros textos es Lucifer, mientras Enlil es Satanás y tanto uno como otros tenían sus admiradores o partidarios y ellos eran lo que hoy conocemos como “Ángeles Caídos».
Estos fueron los 200 Ángeles Caídos, los ‘Vigilantes’ que se mencionan en el ‘Libro de Enoc’ que llegaron como hermosos ángeles masculinos e irresistibles para muchas mujeres humanas a las que sedujeron para tener sexo con ellos.
Los descendientes de estos se convirtieron en los Nefilim bíblicos y se extendieron a lo largo del mundo estableciéndose tanto en Mu como en la Atlántida aproximadamente al mismo tiempo.
Se cuenta que los Lemurianos eran protectores y guardianes de Gaya, que también es un ser vivo con un alma en evolución y en numerables ocasiones habían avisado a los Atlantes de no hacer experimentos genéticos con la estirpe de la Tierra o utilizar armas nucleares, pero al contrario que los Lemurianos que habían elegido la espiritualidad y la naturaleza comandados y dirigidos por reinas y chamanes en una sociedad matriarcal, los Atlantes eligieron la tecnología y fueron gobernados por reyes.
De acuerdo a la Ley, aquel que heredara el trono de uno de los reinos de la Atlántida seria el primogénito de la línea más pura de sangre aria en aquel momento, el primogénito resulto ser una mujer, sin embargo, antes de que ella alcanzara la edad madura sus padres alumbraron un bebé de sexo masculino que se convirtió en el sucesor al trono y fue conocido en Sumeria como Ea o Enki y en Grecia como Poseidón o “Dios Océano”.
El Príncipe Ea fue el primero y el último rey de reyes de la Atlántida, nacido en Orión, por lo tanto, era un ario y es por esto que llamaron a toda su línea de reyes arios “Minos” ya que era así como se apelaba a los hijos de la Diosa Serpiente la línea más pura de los reptilianos híbridos.
El Príncipe EA era un gran genetista que pasaba gran parte de su tiempo bajo el fondo del mar trabajando en un proyecto al que llamo “Elohim” y basaba sus experimentos y ensayos en la creación de híbridos humanos de primera generación, pero al ser consciente de que en el futuro tendría que volver a su lugar de origen, tomó para si una mujer humana para mantener intacta su línea de sangre y consintió que sus diez hijos híbridos favoritos gobernaran primero en la Atlántida y posteriormente en el Imperio Sumer.
Cuando llego el momento de volver a casa muchos así lo hicieron, pero un grupo de ellos permaneció en la tierra gobernados por un poder en la sombra.
En un principio en la Atlántida, aunque reinaba un sistema patriarcal Ea consentía y aprobaba que los humanos que poseían el fuego de la diosa practicaran el chamanismo y así en el astral lograban sintonizar con su vibración para ganar poder a costa del esfuerzo de los humanos, pero llego un momento en que esta práctica se convirtió en adoración.
Al igual que en Mu, las sacerdotisas chamánicas podían comunicarse con los animales especialmente con los delfines y las ballenas, mientras que los chamanes y mucha gente de Fuego habían desarrollado habilidades telepáticas de visión remota que eran utilizadas para ayudar a las personas.
Pero cuando Ea abandonó el planeta algunos reyes se sintieron amenazados por las habilidades que las hembras poseían e intentaron extraerla por la fuerza a través de la energía sexual, pero al ver que no podían obtener ninguna energía a través de la violación ya que estas no alcanzaban el orgasmo, intentaron manipularlas y confundirlas haciendo pactos con ellas ofreciéndoles privilegios si tenían relaciones sexuales con el gobernante voluntariamente.
Aunque podían acumular la energía sexual en el cuerpo no eran capaces de sostenerla por mucho tiempo por lo que acabaron torturando a las mujeres hasta la muerte, así como a utilizarlas en rituales de magia negra ya que al inducir a la víctima a tan alto estado de estrés y terror, el cuerpo segrega una sustancia llamada adrenocromo derivada de la oxidación de la adrenalina que al ingerir este psicotrópico se experimentaba una sensación similar, aunque algo superior, al consumo de mescalina lo que produce enormes picos de euforia y potencia para acceder a reinos que de otro modo no podían alcanzar ya que según ellos, al beber sangre con la adrenalina de la víctima bebían la sangre de la diosa.
Por este mismo motivo se generaron a su vez todo tipo de guerras, violencia y el mal uso de la energía tanto sexual como tecnológica.
No hay nada malo con la tecnología e incluso cierta tecnología puede ser beneficiosa y eso lo hemos podido observar en grandes inventos que la humanidad ha podido aprovechar en muchos de ellos desarrollados por Nicola Tesla del que seguro ya habéis oído hablar, pero cuando la tecnología se utiliza para la guerra, el espionaje, el control mental, o sólo es accesible a unos pocos grupos seleccionados, consideramos que está siendo mal utilizada y en la Atlántida así fue.
Al igual que está ocurriendo en la actualidad, en la Atlántida, los señores supremos y sus secuaces se alimentaban del miedo y también utilizaron tecnología y la energía sexual para controlar las mentes de las personas y sus pensamientos ya que una población pequeña era mucho más fácil de controlar.
Se cuenta que el señor Enlil no estaba de acuerdo con la creación de su hermanastro Enki, es más, se había propuesto destruirlos, aunque a pesar de ello recurría a “Los Linajes” o gigantes como fuerza militar usando a los más agresivos como líderes militares posicionándolos al frente de las batallas. En muchas películas de “ciencia ficción” hemos podido ver algunos de estos gigantes.
Estas criaturas eran tan impredecibles y poco fiables que nunca podías dormir tranquilo y aunque algunos de ellos tenían buenas relaciones con la estirpe humana, otros se hicieron caníbales.
Se comenzó a poner híbridos humanos pura sangre para que gobernaran cada sitio estratégico, pero el problema es que comenzaron a crear gente ignorante para así poder manipular al pueblo llenándolos de miedo, los sacerdotes inventaban historias sobre los peligros que existían en el bosque y cuentos sobre monstruos o fuerzas invisibles que devoraban personas, poco a poco la gente se fue tornando supersticiosa y dejaron el poder al sacerdocio convirtiéndolos en los «protectores del mal».
Las guerras y las conquistas extendieron los diez reinos del Imperio Atlántico y los sirios comenzaron a alimentarse cada vez más de las vibraciones del miedo utilizando al Sacerdocio para su interés haciéndoles sentir importantes y alimentando cada vez más su ego.
Parte de Egipto y Europa Occidental también fueron conquistados y por todas partes se realizaban horribles rituales como muestra de su poder, algunas personas se rindieron convirtiéndose en parte de la Atlántida, otras fueron expulsadas, muchas asesinadas y cuantiosos pueblos conquistados acabaron como esclavos de los reyes Atlantes.
Como parte de la expansión EA puso a uno de sus reyes cerca del territorio del Señor Enlil y este se sintió amenazado pesando que los híbridos de EA tenían demasiado conocimiento y podrían con el tiempo parecerse a los dioses así que el mismo decidió trabajar en su propio experimento para hacer desaparecer a la humanidad comenzando así el conflicto entre el Clan RAM o seguidores de Enlil y el Clan de la Serpiente o seguidores de Enki.
Enlil pretendía usar a la humanidad como soldados para así dejar que se destruyeran entre sí. EA por el contrario deseaba restablecer la paz entre los clanes para salvar a sus creaciones.
En ese momento era Marduk el hijo de EA quien reinaba en Babilonia, sirio por parte de madre y ario por su padre y mucho más agresivo que su padre, comenzaron a pelear con más brutalidad, mientras tanto para Enlil la humanidad se estaba convirtiendo en un veneno contaminando el planeta con su rápida reproducción ya que a pesar de las guerras no conseguía matar suficientes humanos como para poner fin al experimento de su hermanastro y entonces fue cuando Enlil se planteó utilizar armas nucleares.
En medio de todo este conflicto un híbrido humano se convirtió en uno de los favoritos de EA, su nombre era Utnapischtim, más conocido por vosotros como Noé y trató de convencer a la gente que dejara de adorar a los «dioses» y se ocuparan de sus propias vidas ya que EA les había enseñado a ser autosuficientes.
Pero en ese momento, la tecnología ya había alcanzado su punto máximo en el extenso Imperio Atlante y la exploración del interior de la Tierra les llevo a encontrarse con seres que residían en grandiosas ciudades subterráneas formadas por un inmenso sistema de túneles y enormes cavernas que habían sobrevivido a anteriores experimentos.
Los habitantes de los mundos subterráneos eran seres pacíficos que se consideraban a sí mismos herederos legítimos del planeta, y no permitirían a los intrusos Atlantes inmiscuirse en su mundo, pero los Atlantes usaron la fuerza y fue cuando estalló la guerra.
En medio de este desbarajuste, los astrónomos anunciaron e informaron a Enlil que debían evacuar lo antes posible ya que un gran planeta se acercaba rápidamente al sistema solar y haría que la capa de hielo de los polos se derritiera produciendo grandes desastres naturales y grandes partes del mundo quedarían inundadas, mientras los científicos de EA buscaban soluciones a la catástrofe Enlil vio este suceso como una gran oportunidad de destruir la creación de Enki y como comandante los obligó a mantenerse al margen para que toda la humanidad incluidos los Nefilim se ahogaran en el Diluvio y tanto el proyecto Erectus que él mismo tenía en marcha, como el proyecto Elohim llegarían a su fin.
A media que el planeta se acercaba la fuerza gravitatoria de este hizo que los cambios empezaron a notarse, pero EA incumpliendo la orden de su comandante puso en aviso a su hijo Utnapischtim de lo que estaba por suceder y lo instruyó a la construcción del conocido arca para salvarse a sí mismo, su familia y advirtiera a tantos como pudiera que actuaran con la mayor rapidez posible.
Cuando llego el temido momento los polos de la Tierra se invirtieron y se desató el infierno en la Tierra donde millones de personas y animales perecieron sin ser apenas conscientes de lo que estaba ocurriendo.
Cuando por fin el agua se calmó y la tierra se secó los supervivientes se trasladaron a tierras más bajas y los dioses volvieron.
Reconstruyeron el planeta con una nueva especie de seres humanos, pero mucho más obedientes e ignorantes fue entonces cuando el comandante Enlil prohibió a EA volver a crear, pero lo que él desconocía era que algunos gigantes habían sobrevivido al Diluvio dejando como herederos a los egipcios, mayas, incas, chinos primitivos y lo que hoy día se conoce como mitos y leyendas que no es más que la historia no escrita.
Y este es el relato de todo este secreto a voces de como Los Hijos del Sol de Agua o Cuarto Sol fueron tragados por las aguas y de como de la mezcla entre la semilla Aria y los supervivientes de la Atlántida surgieron Los Hijos del Quinto Sol que según las profecías perecerían por el fuego y los terremotos, nuestra raza actual. La raza Aria.
